El aporte del saber campesino al desarrollo sostenible

Rist S.

Co-Director AGRUCO-COTESU, Cochabamba, Bolivia

 

1. Introducción

En la reunión de la cumbre de la tierra, celebrada en Río, 500 años después de la llegada de Colón al continente Americano, se establecen las bases para un desarrollo sostenible a nivel mundial. Los criterios definidos para este nuevo paradigma de desarrollo, son tomadas a partir de una visión holística, señalando que la sostenibilidad tiene que lograrse considerando simultáneamente los niveles de lo social, económico, ecológico y cultural.

Sobre esta base un desarrollo rural sostenible tendrá las siguientes características:

- Basarse en una visión y un enfoque holístico.

- Cada espacio-tiempo tiene características contextuales específicas que facilitan y limitan el desarrollo, impidiendo pensar en modelos universales.

- Integrar y no priorizar en forma unilateral objetivos ecológicos, puesto que apuntar a su preponderancia resultaría tan negativa como la exclusividad que actualmente gozan aspectos económicos.

- Aceptar que una participación verdadera de los hombres y mujeres del área rural en el proceso de desarrollo, significa un diálogo intercultural entre distintas visiones de ver el mundo.

2. La Universidad Mayor de San Simón (UMSS) y el desarrollo sostenible

Ya antes de que se estableciera, a nivel internacional, la necesidad de un Desarrollo Sostenible, Autoridades Universitarias y Facultativas de la UMSS reconocieron que el nuevo paradigma de desarrollo se constituirá en un reto grande para la investigación, formación e interacción social, lo que les permitió complementar las capacidades propias con un apoyo especializado en el marco de la Cooperación Internacional. Esta política se ha plasmado en un considerable número de convenios de Cooperación, facilitando que hoy día la UMSS representa una institución que aporta significativamente a la implementación de un desarrollo sostenible.

Un ejemplo de ello representa el Programa Agroecología Universidad Cochabamba (AGRUCO) que inició sus actividades en busca de su aporte para el desarrollo rural sostenible en el año 1985, basado en un convenio de Cooperación entre la UMSS y COTESU/INTERCOOPERACION.

El punto de partida constituían los fundamentos de la Agricultura Ecológica de tipo europeo. La cual enfatiza, sobre todo los procesos biológicos en el análisis, lo que no permitía en la acción misma, tomar en cuenta las presiones socio-económicas, culturales y políticas. El concepto por lo tanto evoluciona hacia la Agroecología, que considera a los agroecosistemas como resultado de la coevolución entre sociedad y medio ambiente. (Delgado, 1993). El rol más activo en la conducción de esta coevolución, asume el hombre, que, a través de prácticas, relaciones sociales y sus conocimientos y experiencias acumuladas, han formado comunidades campesinas. Las estrategias de la vida en el campo permiten la transformación de la naturaleza en agroecosistemas de acuerdo a una filosofía propia de los actores.

3. Comunidades campesinas: más sostenibles que todos los "proyectos"

Partiendo de una visión holística, basada en la Agroecología, se reconoce que en el área rural encontramos múltiples expresiones de una búsqueda para un desarrollo propio que se inició desde hace milenios atrás. De este modo, en una perspectiva histórica, se evidencia que, las comunidades son mucho más sostenibles, que cualquier "proyecto" de desarrollo.

Un "proyecto" para el desarrollo rural sostenible por lo tanto sólo puede esperar un futuro más allá de su existencia siempre limitada, cuando logra insertarse al propio proceso de desarrollo de las comunidades campesinas. (Rist, 1992)

4. La Universidad y el saber campesino

Insertarse, desde un "proyecto universitario", a los procesos sociales, productivos y tecnológicos en las comunidades, sólo se logra dejando de un lado el "proyectocentrismo": en vez de ser el centro, el proyecto acompaña la vida en el área rural.

Interrelacionarse con la vida en las comunidades campesinas significa también superar la existencia universitaria en una "torre de marfil" y buscar nuevas estructuras institucionales y metodologías de trabajo en favor de visiones y acciones interdisciplinarias. En el caso de AGRUCO, se ha optado para configurar un programa con dichas características, que reconoce que en las comunidades campesinas existe un cuerpo de conocimientos y experiencias que son gestionados, revalorizados, renovados y complementados a partir de los objetivos propios de las familias campesinas.

De acuerdo al marco institucional representado en la Figura 1 se logra, partiendo siempre de la realidad del área rural, una retroalimentación cíclica y continua entre los ámbitos de investigación, formación e interacción social, que es un modelo mucho más acertado, de lo que convencionalmente se considera como "transferencia tecnológica", percibido como un proceso lineal y vertical de investigación - adopción - difusión. (AGRUCO, 1994).

5. El apoyo al desarrollo sostenible

Con sus numerosas investigaciones AGRUCO logró anticipar para el contexto andino lo que a nivel internacional cada vez más está siendo reconocido; existe una sorprendente congruencia entre muchas formas de vida y de producción encontradas en las comunidades campesinas, con los fundamentos de un desarrollo sostenible. La validación de numerosas tecnologías o formas de organización campesina comprueban esta situación como por ejemplo: la viabilidad de prácticas para el control de la erosión con sus formas organizativas respectivas basadas en la reciprocidad, tecnologías para el control ecológico de plagas, enfermedades o parásitos en plantas y animales, sistemas agrosilvopastoriles o estructuras y redes sociales que apuntan a la redistribución comunal, sin impedir la iniciativa privada de las familias campesinas (cuadro 1).

Figura 1. El marco institucional universitario de AGRUCO para la interacción con el sistema comunal.

6. Un elemento clave del desarrollo sostenible: la revalorización del saber campesino

La correspondencia, cada vez más evidente, entre un desarrollo sostenible y muchos aspectos de la agricultura campesina, sin embargo, lleva a preguntarse lo siguiente: ¿si es así, por qué hay, entonces, tantos problemas ecológicos y socio-económicos que caracterizan el área rural?.

En el largo camino recorrido, para buscar una respuesta sincera a esta justificada pregunta, primero se ha descubierto una especie de "ceguera parcial" en las metodologías de investigación y planificación del desarrollo: estamos acostumbrados a ver en primer lugar los problemas del área rural, lo que en su fase de implementación de las soluciones, lleva a ocuparse con lo aún inexistente, que debe ser creado recién con la ayuda de los "proyectos". De esta manera se ha perdido de vista las potencialidades que, coexisten con los problemas.

Conscientes de la existencia y relevancia de la sabiduría, y experiencia de las familias campesinas se descubre la importancia de la práctica de la revalorización del saber campesino. Con esta práctica se logra integrar al desarrollo el vasto potencial de experiencia acumulada en la memoria colectiva e individual de miles de hombres y mujeres.

Un análisis profundizado permitió establecer, que la erosión del saber campesino, no es atribuible a su falta de pertinencia sino más bien es consecuencia de la ignorancia que ha sufrido, tanto de parte de los planificadores del desarrollo como de parte de las familias campesinas, quienes, bajo la creencia subyacente de los "proyectos", percibían el futuro y el progreso como "tiempos nuevos", desarticulados del pasado. De esto resultó que el saber campesino, cada vez más se retiró a espacios aislados o "islas de conocimientos", limitando su aporte al desarrollo sostenible.

La revalorización del saber campesino por lo tanto tiene un triple reto que enfrentar:

- Tiene que buscar metodologías de trabajo a nivel de los "proyectos", que permiten apreciar el valor actual y futuro de elementos del Saber Campesino

- Tiene que encontrar metodologías de apoyo a las familias y comunidades, que les permiten reflexionar sobre su propio cuerpo de conocimientos para dinamizar un desarrollo basado en las aspiraciones propias.

- Tiene que interrelacionar las "islas de conocimiento" del área rural, con los espacios donde el saber campesino ya ha sido erosionado demasiado.

En el recuadro se ejemplifica algunos aspectos fundamentales de una metodología de trabajo, que se basa en la revalorización del saber campesino.

7. El saber andino y los aportes externos

Lo expuesto hasta aquí provoca la interrogación relacionada a la pregunta "si un desarrollo basado en la revalorización del saber campesino acepta aportes externos o si se trata de un concepto cerrado". Un análisis profundizado demuestra que el sistema de conocimientos andinos no es cerrado sino que se caracteriza por la incorporación de un gran número de innovaciones externos como es la tracción animal, herramientas, cultivos como los cereales, etc.

Lo común es que se trata de la absorción selectiva de elementos externos, basado en una valorización de los mismos, en base a los principios andinos de concebir el mundo. La revalorización del saber campesino por tanto apoya el proceso de "andinización" de los aportes externos, considerando sin embargo los siguientes dos aspectos: debe existir igualdad de condiciones entre las partes que interactúan y los aportes externos deben someterse a una valorización socio-cultural, enriqueciéndolo y no menoscabando el cuerpo de conocimientos existente.

La revalorización de los conocimientos campesinos: el ejemplo de la predicción del clima.

Al inicio era la observación de los técnicos más sensibles, que se dieron cuenta que algunas familias campesinas, durante todo el transcurso del año están observando un gran número de indicadores botánicos, zoológicos, atmosféricos, astronómicos y rituales. Las interpretaciones, hechas en base a los indicadores, son claves para determinar las épocas adecua das para escalonar las siembras, en función al clima esperado.

Luego de la observación de la práctica el técnico, juntamente al campesino, registra cuidadosamente los detalles e interpretaciones respectivas, en una "ficha de revalorización". En un próximo paso, esta ficha es presentada por el campesino tecnólogo y el técnico del "proyecto" en una reunión comunal; entre los participantes se genera una reflexión entorno al valor, aspectos técnicos o socio-económicos de la práctica, llevando frecuentemente a modificaciones de la versión inicial de la ficha.

De este modo se elabora una versión validada por la comunidad, que es devuelta en el número deseado. También tiene que ser presentada en una reunión de los técnicos del "proyecto", para que posteriormente la puedan integrar a su accionar.

Figura 2. La floración de la yareta (Azorella glabra), es observada por los comunarios de Japo como un indicador confiable de la producción de papa.

Una copia de la versión final es mandada al Proyecto de Tecnologías Andinas en el Perú, que en el marco de una red de instituciones que practican la revalorización del saber campesino publica tomos con las tecnologías revalorizadas en los países andinos. Hasta la fecha existen 12 tomos, con la descripción de más de 750 tecnologías campesinas.

Las tecnologías revalorizadas se convierten en fuentes valiosas para la búsqueda de alternativas del desarrollo campesino, provenientes de áreas más extensas de lo que está al alcance de un proyecto específico; también pueden ser el inicio para una interrelación horizontal entre una comunidad interesada que desea conocer una tecnología nueva que practican comunarios de otra región. A la vez, las fichas de tecnologías campesinas pueden convertirse en punto inicial para validarlas en el marco de una investigación científica, como se hizo por ejemplo en el caso de la predicción del clima, donde se demostró que una buena sincronización del ciclo vegetativo con el de las lluvias facilita rendimientos mayores en un 50%, en comparación con las fechas de siembras inoportunas.

Cuadro 1. Análisis comparativo entre algunos principios básicos del desarrollo sostenible y la agricultura andina actual.

8. Bibliografía consultada

AGRUCO, (Agroecología Universidad Cochabamba) 1994. Plan Rector para la fase 1994 a 1998. Cochabamba.

ALTIERI, M., 1995. Una Alternativa dentro del sistema - la Agroecología hace trabajar las sinergias para conseguir "agroecosistemas" autosuficientes. En: CERES, Revista de la FAO, N° 154 (vol 27, N° 4). Roma.

DELGADO, F., 1993. La Agroecología en las Estrategias de Desarrollo Rural Centro de Estudios Regionales Andinos "Bartolomé de las Casas", trabajo del Colegio Andino, N° 9, 2da. ed. Cuzco.

RIST, St., 1992. Desarrollo y Participación experiencias con la revalorización del Saber Campesino en los Andes Bolivianos. Serie Técnica N° 27 del Programa Agroecología Universidad Cochabamba (AGRUCO) - Cochabamba.