Un viaje botánico de Sorata a Tacacoma

Cárdenas M.

 

En Abril de 1950, hemos realizado un viaje de recolección de papas silvestres entre Sorata y Tacacoma, atravesando una de las zonas más interesantes botánicamente, al parque pintorescas, de la Provincia de Larecaja en el Departamento de La Paz.

Corno es sabido, el botánico francés Gilbert Mandon. Residió en Sorata como Gerente de una Empresa Aurífera, por varios años, a fines del siglo pasado y coleccionó un abundante material botánico en esa población y sus vecindades. Este material proporcionó muchas especies nuevas interesantes. No dejó Mandon, ningún diario de sus viajes botánicos, pero por las especies que conocemos de sus colecciones, podemos deducir que también hizo el recorrido de Sorata a Tacacoma. Debió haber realizado, colecciones tan prolijas, que los botánicos que le siguieron en la exploración de la flora de Larecaja, como Rusby, Buchtien y otros, hallaron solo muy pocas novedades.

En lo que se refiere a papas silvestres, hemos vuelto a encontrar todas las especies descubiertas por Mandon en Larecaja sin haber añadido ninguna nueva. En 1946, descubrimos la especie Solanum achacachenses Cárdenas, pero no en la Provincia de Larecaja propiamente sino más bien en la cumbre situada sobre el caminó que conduce de Achacachi a Sorata, que debe estar posiblemente en el límite de aquella provincia con la de Omasuyos.

Entre las especies de papas silvestres, descubiertas por Mandon, una de las más raras, es Solanum virgoltorumi (Bitter) Cárdenas et Hawkes. La encontramos en 1946 en un solo ejemplar al salir del Hotel Prefectural de Sorata, hacia a la cumbre de Achacachi. No existe material vivo de esta especie, en ninguna estación agrícola.

La especie Solanum circaefolium Bitter, tan rara por su aspecto gracil, sus flores estrelladas blancas y sus bayas capsiciformes, la hallamos en su localidad de tipo, que es el Monte Iminapi, cerro muy alto con una cruz en su cumbre, situado a un lado del camino a Tacacoma y a más de 10Km de Sorata. No es muy fácil encontrar esta planta, teniendo como único dato de su ubicación, el del Monte Iminapi, ya que este, es alto y extenso. Empero, si se toma el desvío de la Hacienda misma de Iminapi y se asciende tendiéndose hacia a la izquierda, puede localizarse esta papa silvestre, debajo de los matorrales, a la sombra y en un suelo pizarroso muy suelto. Una segunda localidad para esta especie, fue hallada por la colectora inglesa Srta. W. Brooke en la Mina del Gran Poder, situada debajo de Tacacoma, en 1949. El pasado año, hemos vuelto a ver en Abril, un solo ejemplar de esta misma Solanáceae, en el camino que sube de Sorata hacia a la cumbre de Tusuhuaya al ir a Tipuani.

En el trayecto de Sorata al desvío de Iminapi, no encontramos muchas plantas de interés, fuera de Calceolaria Guentherii Kranzl. y Oxalis medicaginea H. B. K, esta última muy abundante en los bordes húmedos del camino. Al entrar hacia la base del Monte Iminapi, encontramos la Malvaceae de grandes flores rosa lilas Tarasa Mandonii, (Baker f.) Kearney. Hacia a la mitad de este gran cerro, se destacaba también un tabaco silvestre arboreo que resultó ser Nicotiana tomentosa R. et P.

De regreso de las faldas del Iminapi, volvemos a tomar el camino a Tacocoma que sube bruscamente. En las alturas de Anilaya, observamos una Puya de flores amarillas, semejante en su hábito a Puya Herzogii Witt., aunque con la inflorescencia de extremo puntiagudo en vez de redondeado y que resultó ser una nueva especie, descrita por el Dr. Lyman B. Smith, como Puya ctenorhyncha L. B. Smith.

De la cumbre de Anilaya bajamos por una larga pendiente más o menos suave hasta llegar a un río que está situado casi a la mitad del camino carretero entra Sorata y Tacacoma. De aquí subimos nuevamente a una ladera que se extiende hasta llegar a Tacacoma. En los días en que hacemos este viaje, tenemos la suerte de observar uno de los fenómenos meteorológicos más bellos de los Andes boliviano. El camino que recorremos en ladera, se extiende por una altura media de 3.500m; tenemos a su borde, un inmenso techo de nubes blancas que nos da la ilusión de un paisaje marino del que emergen como islas, las cumbres de los picos cordilleranos. Se diría que navegamos en un mar tranquilo y a momentos, quisiéramos dirigirnos hacia una de las islas próximas que son como hemos dicho, cumbres de montaña, sino supiéramos que lo que nos parece agua, son nubes que cubren los profundos precipicios por cuyo fondo, corren diversos ríos.

Sobre los bordes de esta parte del camino, situado en una ladera de altura más o menos uniforme, crecen unos árboles de 3 a 4m, de altura, de follaje ceniciento blanquecino y flores anaranjadas, que corresponden a la especie Buddleia montana Britt. En las grietas húmedas y a la derecha del camino, llama la atención por sus grandes flores rosadas, la especie Begonia Veitchii Hook, frecuente en las vertientes orientales de los Andes bolivianos desde La Paz hasta Chuquisaca. De trecho en trecho y enrredándose a la parte inferior de pequeños arbustos que crecen en quebradas húmedas, aparecen las plantas de "Isaño" Tropaeolum tuberosum R. et P., dando la impresión de que fueran realmente silvestres y no escapadas del cultivo. Entre las ramas de la Buddleia montana Britt., observamos también una Compositae de grandes flores anaranjadas, que es Mutisia Mandoniana Wedd. Al acercarnos a Tacacoma que está al final de la larga ladera que sube desde la Quebrada de Anilaya, encontramos una enorme cantidad de unos hermosos arbustos y aun árboles de hojas plateadas y flores azules, representativos de la especie Lupinus soratensis Rusby, que sobre el antiguo camino de herradura a Mapiri cuenta con ejemplares arbóreos de talla y grosor de tronco mayores. Junto a estos arbustos y en suelo arenoso húmedo, vemos así mismo una gran cantidad de plantas de Solanum candolleanum Berth. de talla mayor a la de las papas cultivadas corrientes y de grandes flores azul violetas. Esta especie de papa silvestre que también la encontramos en la Mina del Gran Poder, debajo de Tacacoma, fue hallada antes que por nosotros, por la Srta. Brooke ya mencionada y también en la mina de referencia. Es sabido que las papas silvestres, crecen por lo general en sitios restringidos y dominadas por la restante vegetación espontánea o silvestre; sin embargo, S. candolleanum Berth., aparece en estas regiones, constituyendo la porción dominante o pseudoclimax de la formación herbosa correspondiente.

En las quebradas húmedas y sobre el borde del camino, aparecen unos ejemplares de 1 a 1,5m. de altura de Poecilochroma lobbianum Miers, con grandes flores campanuladas de color amarillo Con manchas púrpuras, de aspecto exótico. Entre estos árboles u otros, se destacan grupos de flores rojo anaranjadas de aspecto muy hermoso, que corresponden a la enrredadera Bomarea aurantiaca Herb.

Al entrar al pueblo mismo de Tacacoma, situado a 3.400m. sobre el nivel del mar, coleccionamos dos especies más de Lupinus que son: L upinus Buchtienii Rusby y Lupinus Rusbyanus C. P. Smith.

Tacacoma, es un pueblo situado en una altura húmeda y casi siempre cubierta de neblina. La tarde en la que llegamos, encontramos por suerte, el cielo despejado y así nos dirigimos de inmediato a una colina próxima o calvario del pueblo, para coleccionar la flora característica de esta región. Hallamos unas plantas pequeñas de hojas subuladas de Plantago monticola Dcne, la Labiatae aromática Lepechina confusa (Briq.). Epling y la Compositae con hojas lobuladas Jungia divaricata Rusby y un hermoso arbusto de grandes flores rojo obscuras y pubescentes que es Salvia Dombeyi Epling. Este arbusto, es el "Ñucchu" de Cuzco, que también lo encontramos en Italaque en 1947.

Al siguiente día en la mañana, bajamos de Tacacoma, a la. Mina del Gran Poder donde se explota oro. En 1950, ocasión de nuestra primera visita a esta zona, la mina estaba en pleno trabajo y tenía una casa de administración bastante cómoda. En 1955, no existían sino ruinas de esta mina. El camino de Tacacoma a la Mína es una senda muy pendiente de más o menos,6km. de recorrido que se lo cubre de bajada en una media hora. Al iniciar esta bajada, encontramos dos especies de Calceolaria, de grandes flores amarillas y hojas lobuladas, que eran Calceolaria lobata Cav. y Calceolaria Herzogiana Kranzl. Llama también nuestra atención la "Ortiga" Cajophora carinoides (Lenne et C. Koch) Urb. et Gílg. Ya cerca de la Mina que está sobre un río, abundan las plantas propias de los suelos húmedos cordilleranos como las de los Géneros: Oxalis, Stevia, Barnadesia, Lyabum, Lupínus, etc. En una de las orillas del río que da hacía a Tacacoma, había en 1950, muchísimas plantas de Solanum circaefolium Bitt., con flores y bayas. Parecía que alguien hubiera sembrado ahí, esta papa silvestre, indudablemente resistente a Phvtopthora. ínfestans. En la orilla opuesta del río, crecía igualmente con profusión, la otra especie de papa silvestre Solanum candolleanum Berth., con tubérculos tan grandes como los de la papa cultivada. Sin. embargo, cuando vo1vímos a este lugar en 1955, no encontramos sino unas pocas y pequeñas plantitas de esta segunda especie y ningún ejemplar de la primea. Esta circunstancia tan curiosa, nos hace pensar que las papas silvestres, se perpetúan de ordinario por tubérculos y no por semillas, lo que eventualmente, puede dar lugar a su desaparición en algunos lugares. Los ejemplares de Solanum canidolleanum Berth., que encontramos aquí, en 1950, tenían una talla de cerca de un metro y sus tubérculos más o menos redondos, alcanzaban hasta a 4cm. de diámetro.

El regreso a Tacacoma, lo hacemos a pie, con mucha dificultad por la pendiente considerable de cerca de 300 metros entre la Mina y el Pueblo. En 1950 vencimos esta subida en cerca de tina hora pero en 1955, lo hacemos solo en 30 minutos. En Tacacoma coleccionamos algunas muestras de papas cultivadas que muestran síntomas conspicuos de ataque de Spongospora y Rhizoctonia. Sin embargo, algunos clones de esta zona., tienen muy buen aspecto, pues, son tubérculos aplanados y de ojos muy superficiales. Al no ocurrir infecciones fungosas, las papas cultivadas en esta región, deben tener un alto rendimiento porque las condiciones climatéricas reinantes, son en algo semejantes a las de las mejores zonas productoras de papa en los Andes.

Al volver de Tacacoma a Sorata, no encontramos va nada que merezca una mención especial a no ser la "Ulupica" que es una Solanaceae arbustiva, de unos 60 a 80cm. de altura, de hojas lanceoladas, glabras, verde obscuras y flores campanuladas azul lilacinas. Las bayas de esta planta, son recogidas para utilizarlas como condimento son esféricas de unos 5mm. de diámetro, rojas cuando maduras y muy picantes. La "Ulupica", se usa en varias regiones de Bolivia en lugar del "Locoto" o Capsicum ,Pubescens R. et P. bajo este nombre vernacular de "Ulupica", deben existir en Bolivia por lo menos dos especies diferentes. En 1950, fue publicada en "Darwiniana", órgano oficial del Instituto Botánico Darwinion de la Argentina, la especie Capsicum eximium por el botánico argentino Armando Hunziker, como correspondiente a la "Ulupica" y sobre material botánico procedente del Norte Argentino y Sur de Bolivia. Sin embargo, la "Ulupica" de Sorata (La Paz), difiere en algunos caracteres de la flor, de la descripción de la especie creada por Hunziker .

Cochabamba, mayo de 1956.