Contra la "vis formativa aesthetíca" de Berlese

Marcus H.

 

En su obra clásica, Gli Insetti, Beriese escribe lo siguiente en la página 390 del segundo tomo:

"Hay que convenir, que la ornamentación, este complejo de particularidades, a menudo muy vistosas, que no se puede atribuir a funciones de primera importancia en la vida del individuo y de la especie, está llevada en los insectos a un tal grado de variedad y de evolución, que no hay que admitir una soma de energía estética, una fuerza íntima muy potente y exuberante, que trae el organismo al extremo límite de incremento de todo esto superfluo, que sirve solamente al embellecimiento del cuerpo".

No quiero discutir la palabra "embellecimiento", porque la belleza es un sentimiento subjetivo, que cada uno puede juzgar diferentemente. Claro está que con Berlese sentimos un placer estético observando las formas y los colores en el reino de los Insectos; pero como he dicho, esta es una cuestión personal y subjetiva, que no quiero discutir, sino la pregunta fundamental, si estos adornos son verdaderamente inútiles para la conservación del individuo y de la especie. Si cae esta premisa, desaparece también esta "vis formativa estética" de sentido un poco medioeval. El esplendor tornasolar de colores encanta nuestros ojos, pero no es percibido más que en parte por los insectos mismos. Así se sabe que las abejas no ven el rojo, no pueden distinguir rojo y negro. Amarillo y verde son a menudo colores de protección. Los pigmentos son las más veces productos nocivos del metabolismo como las sales úricas, que son depositadas en el cutis y que absorben los rayos solares. Los pigmentos rojos parecen ser más fáciles de ser producidos por el metabolismo y reemplazan a menudo los negros, por ejemplo en los ojos de unas moscas y cicádeas, así como en el cuerpo de Acarídeas y Arañas. A nosotros estos, colores de reemplazo nos parecen especialmente hermosos.

El brillar de las escamas de las mariposas y de los élitros de los coleópteros es un fenómeno 'accesorio de una estructura, que da la solidez. Las rayas y ranuras en distancia 1-3 micrones reflejan la luz de tal modo, que resultan los colores más magníficos de oro amarillo hasta rojo, verde y azul. Estos listones y sus ranuras son elementos formativos, que dan una gran solidez.

Las flores blancas de manzana y cereza reflejan rayos ultravioletas, que los insectos pueden percibir, probablemente en una tinta purpúrea. Las mariposas blancas se protegen de este modo de los rayos ultravioletas que tienen, como se sabe, un efecto destructivo.

Un estafalinido tiene colores muy vistosos y hermosos: su cabeza es negra, el cuerpo rojo-marrón y las alas de arriba de un verde claro luciente. Pero visto a través del microscopio en luz transpasante estos élitros son también rojo-marrón como el cuerpo. Parecen verdes por interferencia debida a una estructura, que da mayor solidez. La belleza es también en este caso accesoria.

El dibujo y la combinación de colores de muchos insectos es sin duda una protección. El color verde de las langostas y el dibujo de debajo las alas en las mariposas son ejemplos bien conocidos. Pero los dibujos y colores de las Libélulas y Cigarras no se explican de este modo y por esto son apreciados como ornamentos superfluos. Pero no es así. En mi tratado sobre la respiración de los insectos, publicado en esta Revista, he demostrado que el ácido carbónico se elimina del cuerpo las más de las veces por tres espiráculos, del dorso toracal. Estos lugares de escape son naturalmente un "locus minoris resistentiae" en la coraza exterior quitinosa y por esto son protegidos por "camouflage". Especialmente claro se puede demostrarlo en Agrion y Aeschna, donde es casi imposible encontrar los espiráculos con un lente de aumento y son visibles solamente en el microscopio en luz transparente. El agujero expiatorio es naturalmente negro, como el dibujo cercante, que se repite en los segmentos vecinos para completar el "camouflage". Así los colores y dibujos de las Libélulas son útiles y comprensibles.

En las cigarras hay rayas blancas y negras en un dibujo hermoso. Entre las negras se encuentran los espiráculos. Siempre hay la misma protección: si los espiráculos no son seguros por su localización como en las abejas o por una construcción saliente como en las pulgas y en Aethalion, siempre son protegidos por colores y dibujo. Con este esclarecimiento se puede excluir una gran cantidad de casos contados como de ornamentos. Es claro, que el camouflage mencionado' de los espiráculos es de utilidad para la especie y la conservación del individuo, por ejemplo contra las picaduras de avispas.

Las esculturas en la coraza de quitina con sus dibujos lineales o reticulares o de estrella tienen siempre causas mecánicas de presión y tracción, exactamente como la espongiosa del hueso. La dermis del cutis de los insectos se compone de diversos estratos variadamente orientados, que superpuestos dan el dibujo accidental de estrellas. Especialmente clara está la causa mecánica del dibujo lineal en la cabeza de los Odontomachini. Estas hormigas tienen una articulación a resorte en sus mandíbulas, que se fijan extremamente abiertas. Por conseguir esto el cráneo ha de ser deformado y por esto tiene un surco profundo. Así toda la energía muscular puede ser almacenada en la elasticidad de la quitina craneal. Si el cierre en resorte es librado las mandíbulas se pegan súbitamente con un crac. Aquí hay líneas muy características en un sistema de la tracción, que he publicado adelante en esta Revista.

En las hembras de Acromyrmex silvestre (Emery) el abdomen está compuesto de listones paralelos recurvados e intercalados en una membrana clara y sutil, que permite la expansión de los ovarios. Resulta un hermoso dibujo, que naturalmente es debido a factores mecánicos (El dibujo publicado en la Revista Entomológica de Río de Janeiro). Estos ejemplos se pueden aumentar a gusto.

El apoyo principal para la idea de Berlese son las hypertrofias plásticas de los insectos, cuyo fin es desconocido. Especialmente los Lamellicornia y los Membracidae tienen estas apófisis. Todas estas protuberancias espinosas, como las poseen por ejemplo muchas hormigas y Cosmerus erinaceus (una Locustida atélica sin alas) son una protección para no ser devorados. El hypermorfismo de Empusa se encuentra en ambos sexos y las planchas llanas en la cabeza, tórax, abdomen y fémures pueden tener un significado en el vuelo como plano de sostén o pare el aterrizaje. Estos insectos no son buenos voladores.

He cogido una Cigarra del género Aconophora con un cuerno arqueado delante de la cabeza. Esta prolongación aparece a primera vista como un ornamento fantástico. Pero este cuerno tiene también su función. El cuerpo de esta Membracida es tosco, las alas se insertan muy adelante y para trasladar el punto de equilibrio adelante existe este cuerno hueco, pero repleto de líquido. Es un órgano mecánico de equilibrio, muy adecuado por su forma aerodinámica al rostro para disminuir la resistencia del aire.

Figura 1. Aconophora sp.

Quiero mencionar de mi protocolo del 4/1/45 unos experimentos, hechos con 6 de estos Aconophora, a los cuales les he cortado con tijera el cuerno (figura 1).

1. He cortado el cuerno y el animal pierde una gota de fluido de la herida; corre en mi mano y cae siempre en adelante, perdiendo el equilibrio.

2. He cortado muy poco del cuerno, sale una gota, el animal salta 60 cm, cayendo sobre el dorso y no puede levantarse sino con dificultad; corre sobre el papel y cae sobre el dorso.

3. Salta muy bien, después de la operación cae sobre el dorso y no puede levantarse sin mi ayuda. Después intenta saltar, abre y mueve rápidamente las alas, pero no alcanza a levantarse. (Estos insectos verdaderamente no saltan, no tienen piernas saltatorias cono las Langostas, sino vuelan, muy repentinamente, pero no lejos, así que parece ser un salto).

4. Después de, la operación está inmóvil como aletargado, corre al ser instigado, cae sobre el dorso.

5. Tiene después de la amputación del cuerno la cabeza muy alta para compensar el equilibrio perdido, salta y desaparece.

6. Corre muy ágilmente, mueve las alas rápidamente, pero no alcanza a levantarse.

Estos experimentos prueban sin duda, que el cuerno de Aconophora no es un ornamento inútil, sino de gran importancia para el individuo. En otras Membracidae hay planchas verticales, que probablemente desempeñan también una función en el vuelo.

La protuberancia del dinastida Oryctes nasicornis no tiene una función evidente. Pero vi una vez a mi gato saltar como loco. Un lamellicorno Colopha claviger se había agarrado en su pata, no solamente con sus patas, sino también con la tenaza de su cuerno.

Al sacar el coleóptero quedaron pelos del gato en esta tenaza, que resulta ser un órgano muy eficaz. Una pinza de-la cabeza articula contra el trozo toracal tosco a modo de cuerno de rinoceronte. Existen grandes variaciones en el desarrollo de estos "ornamentos" en la "huaca-huaca" (figura 2). Pueden faltar totalmente como en la hembra (figura 2c); o bien estar tan reducidos en el macho(figura 2b), que no tienen función. Esta variación indica que esta tenaza es un órgano instable en reducción filogenética. En los Lamellicornos vecinos, que no poseen la pinza de la cabeza, el cuerno de rinoceronte en el tórax es un rudimento, pero no un ornamento estético

Figura 2.

Naturalmente no todo es oportuno en la naturaleza. Los colmillos del jabalí (Barberusa) crecen en espiral, así que finalmente el animal se muere por no poder abrir su boca. Esto es patológico como un cáncer.

En todo caso estoy persuadido de que la mayoría de los "ornamentos" tienen o tenían una finalidad en la vida del animal. Son en parte rudimentos atávicos como en el caso mencionado del cuerno de rinoceronte del Colopha. Si hoy día posiblemente no comprendemos todos los ornamentos como hechuras útiles creo, también, que los ejemplos mencionados bastan para declarar inútil una hipótesis de una "vis formativa aesthética".