Procedimiento básico para el cálculo de rendimiento de forraje en base seca

(Fuente: Campos, H. 2006)

Procedimientos para determinar el rendimiento de forraje,
a partir de una muestra obtenida en campo

Introducción

Cuando se habla en términos de rendimiento de forraje, de forma inmediata se relaciona el mismo con unidades métricas, es decir en kg/ha o t/ha de materia seca. El uso de estas unidades métricas, no necesariamente indica que se evaluó la totalidad del forraje que se produce en una hectárea, por lo general estas unidades, casi siempre, se determinan a partir de una serie de pequeñas muestras que se obtienen en las parcelas de producción y/o en parcelas de investigación.

El propósito de este breve artículo, es generalizar criterios a través de una breve explicación acerca de los procedimientos de campo y cálculos matemáticos empleados para la determinación del rendimiento de forraje, expresados en kg/ha o t/ha, siempre en base seca.

El artículo va orientado a estudiantes en fase de capacitación en áreas de evaluación agronómica de forrajes, pudiendo ser a nivel de investigación o producción.

Algunas consideraciones generales

Como se dijo en líneas precedentes, la determinación de los rendimientos, casi siempre se originan de pequeñas muestras. Antes de obtener de estas muestras debemos tener presente algunas consideraciones:

- Momento oportuno de la cosecha. Antes de proceder a la evaluación del forraje, es importante que la especie a ser evaluada se encuentre en un estado fisiológico apropiado para su aprovechamiento, el momento oportuno de la cosecha varía de una especie a otra, por ello es importante que el investigador y/o el estudiante cuenten con la información necesaria de la (s) especie (s) con la(s) que trabaja (n), para que se pueda realizar la cosecha del forraje en el momento mas oportuno, en la mayoría de los forrajes se asume que el inicio de floración coincide con el momento de mayor acumulación de nutrimentos en la especie forrajera.

- Sistema de siembra. En la producción de forrajes es común encontrar parcelas establecidas bajo los sistemas de siembra por surcos o al voleo. La evaluación del forraje de parcelas establecidas con cualquiera de estos dos sistemas de siembra no representa ninguna dificultad, siempre y cuando se tengan los cuidados necesarios. Se debe tener en cuenta que una muestra proveniente de una parcela sembrada al voleo y evaluada con un marco (superficie conocida), no necesariamente es igual a una muestra proveniente de una parcela sembrada en surcos aún así se haya utilizado el mismo marco (superficie conocida) para su evaluación. No se debe olvidar que las plantas sembradas en surcos ocupan un espacio similar en todas las direcciones, por lo tanto se debe tomar en cuenta que las dimensiones del marco sean las adecuadas, para que puedan "agarrar" el número apropiado de surcos y no se incurra en el error de subestimar o sobreestimar los rendimientos.

Hechas las consideraciones pertinentes, se describirá el procedimiento para la obtención de la muestra, a partir de la cual de realizará todos los cálculos.

Obtención de las muestras en campo

Una vez delimitada el área de evaluación (marco o cualquier superficie conocida), se procede a cosechar y registrar el peso de la materia verde del total de las plantas evaluadas, luego se debe obtener una muestra significativa de por lo menos 200 g. Esta muestra se procederá a secar en un horno de circulación de aire caliente a una temperatura de 105 ºC, hasta peso constante. En el caso que se vaya a realizar un análisis bromatológico del tejido, el secado de la muestra debe ser hecha a una temperatura de 65 ºC durante 48 horas.

Ejemplo 1. Se evaluó una parcela de alfalfa de la variedad Valador en el fundo "La Violeta", cuya superficie total es de 8 m2 (8 surcos separados a 0.2 m y de 5 m de largo). El rendimiento en verde fue de 10.2 kg, se tomó una sub muestra de 200 g la cual se llevó a horno de desecación hasta alcanzar un peso seco constante de 46.4 g.

Determinación del % de materia seca (MS)

% MS = 100*(46.4/200) = 23.2 % MS

 

Rendimiento de materia verde (MV)

8 m2 -------------- 10.2 kg MV

10000 m2 -------- x kg de MV

x = (10000*10.2)/8 = 12750 kg/ha de MV (materia verde)

 

Rendimiento en base seca (MS)

del total de la materia verde obtenida, solo el 23.2 % corresponde a la materia seca, por tanto:

12750 kg/ha de MV ----------- 100 %

x kg/ha de MS ------------------ 23.2%

x = (23.2*12750)/100

x = 2958 kg/ha de MS

Ejemplo 2. Se tomará en cuenta la misma parcela de alfalfa del ejemplo 1, con la diferencia que la evaluación se realizó con un marco de 0.25 m2 (0.5 m* 0.50 m). El rendimiento en verde fue de 0.380 kg, se tomó una sub muestra de 200 g, la cual se llevó a horno de desecación hasta alcanzar un peso constante de 46.4 g.

Antes de proceder a la resolución del segundo ejemplo es necesario analizar un punto relacionado al sistema de siembra por surcos y la evaluación mediante el uso de un marco e una superficie determinada. En el ejemplo 2 se indica que se ha usado un marco de 0.25 m2 (0.5 m*0.50 m) y el rendimiento de materia verde fue de 0.380 kg. En realidad la superficie evaluada es de 0.30m2 y no 0.25 m2, esta aparente confusión se explica con las distancias que existen entre los surcos (0.2 m), si bien el marco en el momento de la evaluación "agarra" 3 surcos, estos en términos de distancia comprenden 0.6 m y no 0.50 m que es lo que mide uno de los lados del marco del ejemplo. Con esta aclaración, el cálculo será el siguiente:

Determinación del % de materia seca (MS)

% MS = 100*(46.4/200) = 23.2 % MS

 

Rendimiento de materia verde (MV)

0.3 m2 -------------- 0.380 kg MV

10000m2 ---------- x kg de MV

x = (10000*0.380)/0.3 = 12666 kg/ha de MV (materia verde)

 

Rendimiento de matera seca (MS)

del total de la materia verde obtenida, solo el 23.2 % corresponde a la materia seca, por tanto:

12666 kg/ha de MV ----------- 100%

x kg/ha de MS ------------------ 23.2%

x = (23.2*12666)/100

x = 2938 kg/ha de MS

Se hace notar que los rendimientos del ejemplo 1 y 2 son ligeramente diferentes, a primera vista daría la impresión que los rendimientos debieran ser muy similares, pero casi siempre ocurre lo contrario, no se debe olvidar que mientras mayor sea la superficie evaluada habrá una mayor exactitud en la determinación de cualquier variable que estemos evaluando.

En el desarrollo de este breve artículo se tomó como ejemplo el cultivo de alfalfa, el hecho de haber usado como ejemplo este cultivo, de ninguna forma limita el uso de los procedimientos para la determinación de los rendimientos de cualquier otro cultivo forrajero.